De madre moreliana, padre duranguense y ascendencia de San Luis Potosí, Federico nació en Querétaro por ahí de mediados del 85. Se ha desempeñado como ingeniero de manufactura, escritor, filósofo, consultor, activista, profesor y demás denominaciones que hablan poco del individuo y mucho del entorno en el que se desarrolla. Desde hace casi 30 años vive en Monterrey y al día de hoy lo que le preocupa es definir una praxis para afrontar el inminente fin del mundo.